Estas vacaciones hemos estado en la zona del Tirol, Austria, y en Alemania. Y aunque hay muchas cosas que visitar, hoy solo os contaré lo bien que lo pasamos en el parque Playmobil, en
Núremberg, Alemania.
Es un parque ideal para niños, que no cuenta con atracciones mecánicas, y
donde disfrutan de mil aventuras. La mayoría de los juegos de los que dispone
el parque animan a los más pequeños a hacer algo de ejercicio, saltar, correr,
trepar por cuerdas…
El parque está dividido en diferentes zonas temáticas, y cada una cuenta
con diferentes juegos para los más pequeños de la casa. Nosotros empezamos a
disfrutarlo en el mundo pirata, donde los niños alucinaron con el barco a tamaño real, al que se puede acceder a través de una pasarela, y donde además
de juegos de cuerdas, rampas, etc, tienen varios pasadizos secretos para ir de
un lado al otro del barco.
Cuando estábamos allí vimos que había unas pequeñas barquitas de remo, en
la que claro está, se montaron los enanos con su papá. Al bajar, nos costó
convencerles de abandonar el gran barco pirata para seguir conociendo el
parque, pero finalmente lo conseguimos.
Nos tocó la zona de los exploradores, donde Miguel, el más pequeño se hizo
fotografías con todos los dinosaurios, mientras que Lucas, el mayor exploraba
las cuevas a las que se accede por cuerdas y que terminan en una pequeña
cascada.
Siguiendo encontramos el Castillo, madre mía cuando lo vieron… Mamá, seguro
que hay caballeros! Papá, donde están las mazmorras! Mamá, hay un campo de
entrenamiento de caballeros! Y así podría seguir mucho rato, jeje
Se lo pasaron pipa encerrando a su padre en la cárcel, con las cuerdas que subían
al castillo, conociendo los diferentes pasadizos que les llevaban de un lado al
otro, sentándose en los tronos reales, y claro está haciéndose fotos con los
caballeros.
Está muy bien montado porque en el patio del castillo hay una especie de
gradas donde los padres se pueden sentar un ratito.
Siguiendo llegamos a la zona de la granja! Disfrutaron de un buen rato
bañando a los caballos y ordeñando las vacas playmobil!
Justo al lado está la zona del Oeste, donde aprovechamos para comer, porque
en esa zona hay varios restaurantes. Nosotros comimos unas hamburguesas que
estaban bastante buenas y muy bien de precio.
Después de comer llegamos a lo que yo creo que les gustó más o sacaron más
partido. Es una zona a la que se accede a través del barco de Noé. Allí hay
varias “piscinas” alargadas con muchísimos barcos, muñecos, ballenas, tiburones…
y mil juguetes más que yo ni había visto disponible para que los niños
disfrutasen jugando. Allí pasamos
bastante rato, jejeje
Por la tarde terminando ya de recorrer el parque encontramos la zona de policías,
con comisaría con cárcel incluida, y una pista de carreras, de las que no puedo
hablaros mucho porque mis peques todavía no tenían la edad para disfrutar.
Ya muy cerca de la hora de cerrar descubrimos una última parte del parque
cubierta, donde había cantidad de juguetes de la marca para jugar… Nunca había
visto tantos! Ni tanto personal montando constantemente … comisarias,
hospitales, grúas, barcos piratas, barcos vikingos, coches de policía,
caravanas, trenes…. Se lo pasaron pipa! Hasta llegue a pensar que nunca nos podríamos
ir de allí!
Y la última visita fue a la tienda, que también es alucinante, y con muchas
cosas a precios estupendos. Nosotros no compramos mucho porque teníamos que
meterlo todo en las maletas, pero algo sí que cayo!
El precio de la entrada también está muy bien porque son tan solo 11 €, y
se puede disfrutar durante todo el día. Y si estáis pensando en hacer una
escapadita en su web podréis encontrar mucha más información http://www.playmobil-funpark.de/en.
Espero que os guste!
Marta
