Hace unos años
mis suegros compraron un apartamento en Benidorm, y aunque a nosotros no nos
gusta demasiado la playa, la verdad es que los enanos la disfrutan un montón.
En un mes hemos
tenido dos puentes en Madrid, con lo que allí nos hemos ido! El primero la
verdad es que no hicimos nada destacable, playa por la mañana y paseíto por la
tarde, pero este segundo hemos hecho una excursión que llevábamos tiempo
queriendo hacer.
Se trata de la
excursión que se hace en barco a la isla de Benidorm. Se sale del puerto o Club
Náutico, donde se pueden comprar directamente las entradas (14 € los adultos y
11 € los niños). Este precio incluye además del barco hasta allí, un viaje en barco
de vista submarina una vez llegado a la isla.
Nosotros lo
hicimos a las 11 de la mañana, y suelen salir cada hora. En el barco la verdad
que lo pasamos en grande, porque había bastantes olas (todo el puente tuvimos
bandera amarilla o roja) y el barco subía y bajaba bastante, pero sin llegar a
marear.
Al llegar, nada
más bajar del barco, subimos al de visión submarina, y claro a los niños les
encanto, porque además de que vieron peces grandes y pequeños, grutas y algún
que otro buzo, tenían la impresión de que iban en submarino, y eso a ellos les
encanto.
Después dimos una
vuelta por la isla, que no tiene mucha cosa, pero está repleta de gaviotas,
algunas con sus crías pequeñas, y otras incluso incubando huevos.
Y terminamos la
excursión tomándonos un refresco en el bar que hay en el embarcadero de la
isla, mientras esperábamos el barco de regreso, (eso fue mucho peor, porque por
el oleaje no pudimos ir en la parte de arriba y mamá en la de abajo regreso
verde de mareo, jijiji), estábamos otra vez en el puerto a la una
aproximadamente, con lo que tienes dos horitas ocupadas y a los niños
disfrutando.
